Y llegamos a la tercera parte de esta posición republicana ubicada en la Sierra de Huétor. En esta ocasión nos vamos a primerísima línea de frente, con nuestras posiciones directamente enfrentadas a las posiciones franquistas de la 32 División.
Aprovechando los desniveles del terreno, y los farallones rocosos, la posición en este parte del Cerro se articula en torno a una línea parapetada realizada en mampostería, con algunos espacios habitacionales en su zona Norte y algún que otro refugio contra la artillería.
En realidad hablamos de dos líneas parapetadas situadas a diferentes niveles. No obstante las posibilidades de un ataque frontal son prácticamente imposibles por el alto desnivel que hay desde la pista que se encuentra bajo la posición y que no existía en tiempos de la Guerra, el resto de aproximaciones se debían de hacer por los barrancos existentes, que estaban bien protegidos y que las ametralladoras de la posición fácilmente podían barrer.
Curiosamente en estas posiciones encontramos restos de cerámica y de uralita, lo cual demuestra que pese a la distancia al enemigo, en estas posiciones dio tiempo de realizar cierta edificación y que también se desarrollaba en cierto modo vida de Trinchera.
El acceso a esta parte de la posición es el más complicado, pues si bien, tanto en la zona del vértice como en la zona intermedia, hay camino y se ve que está más pisado por ganado, esta zona es la más lejana y menos frecuentada, lo que ha propiciado el crecimiento de la vegetación. No obstante llegar al cerro de Buenavista en la Sierra de Huétor es muy fácil a través de un carril de tierra.
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